El Camino del Cambio


Jorge Ramos | El Camino has de elegirlo tú, recorrerlo tú, sufrirlo tú, disfrutarlo tú, en definitiva experimentarlo y vivirlo por ti mism@, con la intención de extraerle siempre el mayor jugo posible. Mas cuando sientas escocer las rozaduras y heridas causadas por los tropiezos y caídas, y tu aliento se acelere, no desfallezcas, solo detente por un momento y mira a tu alrededor, observa el amanecer, mientras respira profundamente gozando la brisa fresca de la mañana, porque acaba de comenzar un nuevo día, y grandes retos te esperan ansiosos por compartir contigo nuevas experiencias.

El sol te saluda cada nuevo día y ve en ti a un ser que va creciendo a cada paso que da, quizás, recordando simplemente lo que ya fue en otros tiempos...

El cambio es paulatino y progresivo, empezó hace tiempo, no es brusco y repentino, el cambio avanza sin descanso; te encuentras inmerso en él, lo percibes. De repente, las respuestas que se te brindan son insuficientes, quieres más. En este sentido, la crisis supone una poderosa palanca, ya no te satisface un cambio de gobierno, sino que aspiras a recuperar determinado modelo de vida ya olvidado en los albores de los tiempos, también con lo nuevo, con la Luz que aporta el cambio en nosotros, en la Conciencia, en nuestra conciencia individual: esto se llama cambio de paradigma.

Como todo proceso de cambio muchas veces lo percibimos, mientras lo transitamos, como algo traumático, para luego darnos cuenta en el tiempo, del significativo crecimiento que este nos trajo.

Lo percibes, aunque apenas comiences a vislumbrarlo y no sepas aún como articularlo, pero ya conoces lo que no quieres.

Sientes que este camino lo debes recorrer tú mismo, otros no lo harán por ti. Tú eres el protagonista.

Rompe las ataduras con el sistema……., no te opongas, simplemente ignóralo en la medida de lo posible, primero un poco, luego más y más...

Trabájate tú mismo y con tu cambio cambiarás el mundo. Busca la respuesta a las preguntas esenciales: ¿quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿a dónde voy?, ¿para qué he venido?, las soluciones están dentro de ti. Explora nuestra razón de ser, la incongruencia de la parte sin el Todo, la polaridad como manifestación de la unidad.Y lo más importante: soltar los miedos, las cargas emocionales, perdonarte y perdonar a otros.

Si, definitivamente, estás conectado, tú estás en el camino.