La Magia de Crear 3 Caramelos de la Nada

Como poner en funcionamiento tu conocimiento por tus convicciones, para tu experimentacion, para convencerte de que funciona.

Soy como tu, hago lo que tu, me alimento y compro lo que tú, ¡Vaya, si no fuese porque nos diferenciamos en el nombre y ligeramente en el físico, yo, seria tú mismo!.

Te cuento algo real y verdadero, una de tantas cosas en las que he tenido la suerte y el placer de experimentar la vida en uno de sus aspectos.

A raíz de unas lecturas, el extractado de algunas publicaciones, el visionado de la segunda parte de “Y tu que sabes” (Ver la Película AQUÍ) y alguna que otra cosilla que riega la planta interior que alimenta mi convicción y que me impele a probar nuevas y fantásticas posibilidades, realicé una creación mental.

Era el jueves 19 de abril 2007, mas o menos las 01:00 AM (repito que acababa de ver la segunda parte extendida de “Y tu que sabes”) y con la energía que me había proporcionado la visualización de la película y la participación en el posterior coloquio... no tenia ganas de dormir y me puse a juguetear con la intención de crear y concretar posibilidades.

No solo imaginé, sino que re-creé intencionadamente con mi sentimiento apoyado en mi acción mental, sentimental e intencional, tres caramelos en el lado derecho del monitor del ordenador de mi despacho, justo allí donde tengo unos sellos, el fechador, los porta-lapiceros y bolígrafos, vaya, justo allí en el rinconcito derecho, con la intención de no separarme ni un milímetro y visualizar a cada momento (que me acordase) la imagen y como dice la canción “y volver, volver volver” (volver a e insistir en ella).

Allí los imaginé cruzados, en una postura concreta e inconfundible, para hacerme una idea conocida, mentalmente escogí los de una farmacia cercana primero, ya sabéis, aquellos de eucalipto redondos, de unos 10mm y envueltos en papel verde y que sus punta no están dobladas, sino que acaban en punta, color verde y blanco y con un rico sabor a menta de eucalipto.

Los coloque en mi proyección mental, dos de base y uno encima, así como medio atravesado en diagonal de izquierda a derecha.

Luego, mentalmente los cambié por otros que te regalan en “La Caixa” (propaganda, tendré que cobrar comisiones, je,je,je)

Al día siguiente... nada, no había sucedido nada, no se habían materializado mis esperados caramelos, lógicamente ya me olvidé durante el fin de semana.

Esta mañana (23 de abril de 2007) cuando llego al “cole” (trabajo en un Instituto de Secundaria), pues tampoco, no se habían materializado mis mentalizados caramelos, claro que yo ya ni me acordaba.

En estas que Germán, un buen amigo y compañero, Profesor de Educación Física en el Instituto, viene como cada mañana, hablamos, lee el diario, comienza a silbar y yo enfrascado en mis escritos, un poco molesto porque sus silbidos no me permitían concentrarme, agarro en mi mano los periódicos y marcho a la Sala de Profes, luego vuelve Germán y echándose la mano en el bolsillo, agarra un caramelo de miel y se lo pone en la boca, dejándome tres caramelos de miel encima de la mesa, en el lado derecho de esta, tal y como yo había imaginado, proyectado y evocado.

¿Cómo lo ves, Increíble? ¡para nada! Mis duendes me habían inducido a realizar el proyecto para ofrecerme oportunidades y posibilidades de creer en mi mismo, de convencerme, de explicarlo, de airearlo para que otros muchos empiecen a creer en si mismos.

Resumen y Conclusión.

Cuando pides, imaginas, evocas, creas, deseas y eres consciente del acto.

Cuando pones toda tu atención e intención, mezclándolo con una buena dosis de ansia (que le llamo yo) en aquello que estas haciendo, y concretas tu petición e insistes y persistes en ello, sin pensar en otra cosa hasta que se concreta y realiza.

El Universo (TU UNIVERSO), se pone a trabajar para entregarte aquello que deseas, creas, imaginas, o simplemente proyectas.

Tardaras mas o menos dependiendo de las circunstancias, “tus circunstancias personales “pureza de vibración, intencionalidad, dedicación y concentración de “energía” en la propia concepción de ti mismo, tu inocencia en no dudar de que tu imaginación se va a concretar materialmente manifestándose en la forma que tu has imaginado, que has elegido, que has proyectado y concretado como un hecho”.

Esta manifestación se tiene que adaptar y hacer la cola correspondiente, o si tu cola de deseos está vacía, se concretará más rápidamente y luego... “Voilá” el milagro se hace, la manifestación se realiza y tu obtienes aquello que habías solicitado.

Fácil... maravilloso... ¿Fantástico?..., pues SI, (así con mayúsculas)

Un abrazo.

Ra.