Generar Electricidad a Partir de Calor Residual con Termocélulas de Nanotubos


Para entender mejor sobre este descubrimiento tecnológico, comenzaremos por explicar de una forma muy explicita, que son los Nanotubos y algunas de sus grandes aplicaciones.

En química, se denominan nanotubos a estructuras tubulares cuyo diámetro es del orden del nanómetro. Existen nanotubos de muchos materiales, tales como silicio o nitruro de boro pero, generalmente, el término se aplica a los nanotubos de carbono.

Los nanotubos de carbono son una forma alotrópica del carbono, como el diamante, el grafito o los fulerenos. Su estructura puede considerarse procedente de una lámina de grafito enrolladas sobre sí misma. Dependiendo del grado de enrollamiento, y la manera como se conforma la lámina original, el resultado puede llevar a nanotubos de distinto diámetro y geometría interna. Estos tubos, conformados como si los extremos de un folio se uniesen por sus extremos formando un canuto, se denominan nanotubos monocapa o de pared simple. Existen, también, nanotubos cuya estructura se asemeja a la de una serie de tubos concéntricos, incluidos unos dentro de otros, a modo de muñecas matrioskas y, lógicamente, de diámetros crecientes desde el centro a la periferia. Estos son los nanotubos multicapa. Se conocen derivados en los que el tubo está cerrado por media esfera de fulereno, y otros que no están cerrados.

Están siendo estudiados activamente, como los fulerenos, por su interés fundamental para la química y por sus aplicaciones tecnológicas. Es, por ejemplo, el primer material conocido por la humanidad capaz, en teoría, de sustentar indefinidamente su propio peso suspendido sobre nuestro planeta; una condición necesaria para la construcción de un ascensor espacial.
Para más información sobre los nanotubos entrar en el siguiente enlace es.wikipedia.org


El Descubrimiento


Las termocélulas basadas en electrodos de nanotubos de carbono podrían ser usadas en el futuro para generar electricidad a partir del calor desechado por fábricas, automóviles e incluso paneles solares.

(NC&T) Así lo revela un estudio, fruto de la colaboración entre el equipo de Baratunde Cola del Instituto Tecnológico de Georgia, y especialistas de EE.UU., Australia, China, India y las Filipinas.

El estudio constituye un importante salto tecnológico, ya que con esta innovación será posible generar eficazmente energía eléctrica a partir de fuentes tan poco atractivas como los tubos de escape de los vehículos, o el calor generado como consecuencia inevitable de diversos procesos industriales.

Recolectar con eficiencia la energía térmica actualmente desperdiciada en las fábricas también podría crear fuentes locales de energía limpia, las cuales a su vez podrían usarse para reducir el consumo energético de una empresa y también sus costos de operación.

Las nuevas termocélulas usan electrodos de nanotubos que proporcionan un aumento del triple en la eficiencia de la conversión de energía, con respecto a los electrodos convencionales.

Una de las termocélulas del equipo de investigación probadas con éxito se parece a las pilas en forma de botón usadas en relojes, calculadoras y otros dispositivos electrónicos pequeños. Sin embargo, una diferencia importante es que estas nuevas termocélulas pueden generar electricidad continuamente, en lugar de estar sujetas a gastarse como les ocurre a las pilas.

La investigación ha conducido también a la fabricación de otras termocélulas, incluyendo conjuntos de láminas de nanotubos con las que envolver las cañerías calientes que transportan gases o residuos varios a temperaturas altas, desechados por las fábricas o las centrales eléctricas. La diferencia de temperatura entre la tubería y su entorno produce una diferencia de potencial electroquímico entre las láminas de nanotubos de carbono que las termocélulas utilizan para generar electricidad.

El equipo de investigación estima que, en el futuro, los nanotubos de carbono de pared múltiple en termocélulas grandes podrían producir energía eléctrica a partir del calor desechado, a un costo inferior al de la electricidad generada por las células solares que sólo pueden usarse cuando brilla el Sol. En una escala más pequeña, las termocélulas del tamaño de una pila botón podrían usarse para energizar sensores o circuitos electrónicos.

El equipo trabajará ahora en los desarrollos adicionales que se requieren para que esta tecnología alcance todo su potencial comercial.


Jorge1270: Desde mi modesto punto de vista podría ser un hallazgo tecnológico importantísimo, teniendo en cuenta la falta de energía que en pocos años afectará a nivel mundial, motivado por el descenso de producción de los recursos fósiles (petróleo), al poder producir menos de lo que se consume, es decir, el llamado Cenit del Petróleo.

Este descubrimiento si lo llegasen a optimizar adecuadamente, y lógicamente no se llegara a encontrar ningún tipo de desventaja. Podría contribuir al menos a paliar la necesidad energética de nuestro planeta, y lo que es más importante contribuir a la limpieza de nuestro medio ambiente.

Si esto aprovecha el calor residual, todo o casi todo lo que nos rodea produce más o menos calor residual, incluido nosotros mismos. Quien sabe si algún día, esto podría llegar a ser el comienzo de nuestra energía limpia…