El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no sólo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y sólo queda la desesperación muda; y al final, el miedo llega a expulsar del hombre la humanidad misma.
El miedo es un sufrimiento que produce la espera de un mal.
El miedo puede llevar a los hombres a cualquier extremo.
El periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano, nos invita a reflexionar acerca de
cómo el miedo a tomado un lugar importante en nuestras vidas; de cómo
influye en nuestro albedrio, en nuestras decisiones importantes y
cotidianas; y cómo se fabrica y propaga esos miedos, muchas veces
injustificados o exagerados, a través de los medios de comunicación en
pro de una agenda de gobierno o interés económico.